ALBA-TCP expone en Bolivia agenda 2030 centrada en la cooperación y solidaridad

Santa Cruz, 11 de marzo de 2024.- El secretario ejecutivo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), Jorge Arreaza, participó este lunes en el Seminario Internacional “Nueva arquitectura financiera regional. Desafíos para una mejor integración en un mundo de cambios”, realizado en Santa Cruz, Bolivia.

Formaron parte del panel la vicepresidenta de la República Bolivariana de Venezuela, Delcy Rodríguez; quien conversó sobre las “Sanciones Económicas Unilaterales”; el expresidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero; quien abordó el tema “Articulación de un Mundo Multipolar; el exmandatario de Colombia, Ernesto Samper, quien habló sobre los “Desafíos de la Integración Regional, 15 años después del Unasur; y el expresidente de Argentina, Alberto Fernández, encargado de hablar sobre “La Nueva Arquitectura Financiera Regional”.

Durante su intervención como ponente, Jorge Arreaza indicó que el bloque regional integrado por Venezuela, Cuba, Nicaragua, Bolivia, Antigua y Barbuda, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Grenada, Dominica y Santa Lucía, está presente y activo para los demás instrumentos de integración.

“El ALBA-TCP no es un mecanismo de integración, es un mecanismo de unión (…) el objetivo es escuchar a los pueblos en el mismo nivel jerárquico de los cancilleres, de los consejos políticos y económicos, nos complementamos, no competimos (…) la Alianza le pertenece a los pueblos”, refirió.

Jorge Arreaza reiteró que el ALBA-TCP está a la disposición de la región para la integración de nuestros pueblos, para la complementariedad de las economías, cooperación, solidaridad y la superación social.

Agenda 2030 | Horizonte Económico

Pese a las estrategias imperiales, Arreaza indicó que el bloque regional está trabajando en la agenda 2030, la cual plantea un nuevo Horizonte Económico, en el que se espera lograr un relacionamiento comercial, dinámico, complementario y justo, entre los países miembros de la Alianza.

“Hay que volver a sentarse y a discutir la relación arancelaria de nuestros países”, pero no desde un mismo criterio, sino de acuerdo con las economías de cada nación y se contemplen las asimetrías, agregó.

En la Agenda 2030, la Alianza trabaja varios horizontes estratégicos que involucran el desarrollo integrado de las comunicaciones y el trasporte, el fomento de la inversión de capitales latinoamericanos, la integración energética, el respeto al medio ambiente, la defensa de la identidad y la cultura latinoamericana y caribeña, así como la concertación de posiciones multilaterales con países y bloques de otras regiones.

Logros para la unión

Fundada en diciembre de 2004 por los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Cuba, Fidel Castro, con una declaración conjunta firmada en La Habana, la actual Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos registró logros significativos que afianzaron la unión de las naciones miembro.

El Secretario Ejecutivo de este mecanismo regional destacó como uno de los principales logros la creación de Petrocaribe, instancia que “salvó a los países del Caribe de una crisis humanitaria en los años 2008 y 2011 con la depresión económica de aquel momento”.

Dijo que el ALBA-TCP salvó a los países del Caribe de un hecho migratorio sin precedentes, especialmente a Haití, pese a no ser un país miembro, sino invitado.

Igualmente, Arreaza destacó en su intervención que la Alianza estableció un puente aéreo humanitario a través de la línea aérea venezolana Conviasa, donde se abordaron situaciones de desastres naturales en países hermanos, así como apoyo con insumos durante la pandemia por Covid-19, entre otros.

Resaltó que más de cinco millones y medio de personas recuperaron la visión de manera gratuita a través de la Misión Milagro, un programa surgido del ALBA-TCP.

De igual manera, el bloque regional logró alfabetizar a unos cinco millones de personas, algo histórico para todos los integrantes del bloque.

A través del Hospital Cardiológico Infantil Latinoamericano de Venezuela se realizaron más de 1.600 intervenciones quirúrgicas; todo gestionado mediante el ALBA.

En materia energética, Venezuela, mediante el ALBA-TCP, vendió petróleo a los otros Estados miembros, creó el Banco del Alba; pero, producto de las sanciones impuestas por el Gobierno de Estados Unidos y sus aliados en Europa, estos mecanismos se encuentran detenidos, denunció Arreaza.

Además, sentenció que las medidas coercitivas unilaterales frenaron en gran medida la alfabetización, el intercambio económico, la educación, la salud, entre otros mecanismos que impulsaba el ALBA-TCP. “Ese es el daño que hace Estados Unidos a los países del ALBA”, agregó Jorge Arreaza.

Venezuela y la nueva infraestructura internacional

Como ponente por Venezuela –país integrante del bloque regional- asistió al seminario internacional la vicepresidenta de la República Bolivariana de Venezuela, Delcy Rodríguez, quien abordó la temática: “Sanciones Económicas Unilaterales”.

A propósito de este tema, Rodríguez aseveró que una nueva infraestructura financiera internacional es imprescindible, especialmente en tiempos de bloqueos y sanciones.

Rodríguez enfatizó que es necesario tomar en cuenta que en los últimos cinco años se fraguó uno de los bloqueos más terribles que haya conocido la humanidad.

“Hoy en el mundo hay más de 26 mil medidas coercitivas unilaterales, y de esas 26 mil, Venezuela tiene 930, pero en 10 países están concentradas 96 % de esas medidas”, alertó la Vicepresidenta, quien también completó señalando que, «el hegemón somete y usa las medidas coercitivas unilaterales -mal llamadas sanciones- como medio de extorsión a los países no alineados a ellos».

Rodríguez propuso ahorrar en las monedas propias de cada país de la región. “Tenemos que financiarnos con nuestras monedas locales”, afirmó.

Recordó que Venezuela tuvo que buscar caminos propios para enfrentar las sanciones. “Bloquear a Venezuela no solo tuvo impacto en nuestro país, sino en la región”, expresó.

Otras visiones alternativas

urante el seminario “Nueva arquitectura financiera regional. Desafíos para una mejor integración en un mundo de cambios”, José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente de España, destacó que Latinoamérica tiene el reto de contribuir a un debate global a favor del multilateralismo, factor de esperanza de este 2024.

Zapatero apostó también al surgimiento de una nueva generación que logre abolir la guerra. “El problema esencial de este primer cuarto del siglo XXI es la violencia, y la debilidad de los movimientos pacifistas.

Agregó: “Hay que cambiar el orden político internacional y hay que estar abiertos a esos cambios”.

De igual forma, refirió que las relaciones comerciales y migratorias siguen siendo muy potentes entre América Latina y Europa, aunque reconoció que la Unión Europea vive actualmente una crisis de identidad.

“Latinoamérica solo tiene una respuesta para el desarrollo económico, es la integración y reducir las desigualdades; lo que se logrará con un nuevo modelo fiscal, por ejemplo”, manifestó Zapatero.

Por su parte, el expresidente colombiano, Ernesto Samper, conversó sobre los “Desafíos de la Integración Regional, 15 años después del Unasur”.

En este sentido indicó: “Nunca había sido tan importante la integración como en este momento”. En el caso de Colombia, destacó que su país decidió sumarse a la “integración hegemónica”, liderada por el imperio estadunidense.

Reconoció que la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) nació con una integración política: “Habíamos recuperado el concepto de Patria, teníamos problemas territoriales, pero no se resolvían con guerras. La región apuntó a la participación democrática y a los derechos humanos. Unasur fue nuestra experiencia más compleja y más avanzada de integración”.

Samper destacó que la región es un oasis de paz, al tiempo que propuso agregarle valor a lo que se produce en cada nación de Latinoamérica, “debemos fortalecer nuestros mecanismos financieros. El mundo está dolarizado y eso no es una globalización, sino una desglobalización”.

Durante el encuentro en Bolivia, el expresidente argentino Alberto Fernández reflexionó sobre «La Nueva Arquitectura Financiera Regional».

Indicó que Latinoamérica debe trabajar de forma concentrada en combatir la desigualdad social. “11 personas tienen el 40 % del patrimonio mundial (…) vivimos en un mundo profundamente desigual», resaltó.