José Martí | Legado de lucha latinoamericana contra el colonialismo

Caracas, 19 de mayo de 2025.- José Martí, un destacado líder del movimiento de independencia de Cuba y un influyente intelectual, fue asesinado en combate el 19 de mayo de 1895 durante la guerra de independencia cubana.

Su muerte ocurrió en la batalla de Dos Ríos, en la provincia de Oriente, donde se encontraba luchando junto a sus compatriotas contra el dominio español.

Martí nació el 28 de enero de 1853 en La Habana, Cuba. Desde joven mostró un fuerte compromiso con la causa independentista, lo que lo llevó a ser encarcelado y exiliado. A lo largo de su vida, Martí se convirtió en un escritor prolífico y un defensor incansable de la libertad y la justicia social.

En 1895, Martí regresó a Cuba con el objetivo de liderar una nueva insurrección contra el colonialismo español.

Aunque su papel no fue el de un militar en el sentido tradicional, su liderazgo y sus ideales inspiraron a muchos cubanos a unirse a la lucha.

Batalla de Dos Ríos

El día de su muerte, Martí se encontraba al mando de un grupo de soldados en una misión para atacar a las fuerzas españolas. Durante el enfrentamiento fue herido gravemente por una bala que le atravesó el pecho. A pesar de que recibió atención médica inmediata, no logró sobrevivir. Su muerte fue un duro golpe para los revolucionarios cubanos y para todos aquellos que creían en su visión de una Cuba soberana.

La figura de José Martí sigue siendo fundamental en la historia cubana y latinoamericana en general. Sus escritos sobre la libertad, la justicia social y la identidad nacional continúan inspirando a generaciones.

En Cuba, es considerado un héroe nacional y su legado se celebra cada año en diferentes conmemoraciones.

Martí también es conocido por su enfoque humanista y su capacidad para unir diferentes corrientes ideológicas en torno a la causa común de la independencia. Su famoso poema «Versos Sencillos» y su ensayo «Nuestra América» son solo algunas de las obras que reflejan su profundo pensamiento y amor por la Patria Grande.

José Martí | Maestro para todos los tiempos

La Habana, 28 de enero de 2025.- A través de su contexto histórico y mucho más allá hasta llegar a nuestros días, el ideario de José Martí nos dejó principios, valores y enseñanzas que nos guían como coordenadas invariables.

Los cubanos tenemos el privilegio de contar con su valioso magisterio en el que hayamos lecciones de patriotismo, humanismo, ética, justicia social, antimperialismo, latinoamericanismo, solidaridad y amor, pilares sobre los cuales forjó desde muy temprano su intenso paso por la vida.

El legado del Apóstol de nuestra independencia está a lo largo del proceso revolucionario cubano. Fieles a su pensamiento político fueron en otras épocas hombres como Juan Gualberto Gómez, Carlos Baliño, Julio Antonio Mella, Rubén Martínez Villena y Antonio Guiteras, entre muchos más que combatieron los abusos y la explotación que durante el pasado siglo caracterizaron a más de media centuria de República neocolonial.

En 1953 –centenario del natalicio del Apóstol- el líder cubano Fidel Castro Ruz reconoció en Martí al autor intelectual del asalto al Cuartel Moncada, acción revolucionaria que el 26 de julio de ese año inició el camino de la lucha armada para derrocar a la dictadura de Fulgencio Batista y poner fin al oprobioso régimen.

“¡Traigo en el corazón las doctrinas del Maestro…!”, dijo entonces el joven abogado y sus palabras tenían el fundamento moral, ideológico y político de una genuina Revolución.

Con absoluta visión José Martí previó el peligro que representaba el imperialismo norteamericano para Cuba y la América Latina. Indicó cuál era la única opción posible y nos alertó muy sabiamente: “De pensamiento es la guerra que se nos hace: ganémosla a pensamiento”. Por eso y mucho más el valor de su prédica lo convierte en nuestro contemporáneo.

El concepto sobre la necesidad de crear una  organización unitaria –el Partido Revolucionario Cubano- para la encauzar y dirigir la contienda emancipadora de 1895 contra el colonialismo español, constituyó inspiración no sólo para los patriotas de aquella etapa, sino que devino semilla para otras generaciones de cubanos que años después iniciaron la construcción del socialismo en nuestro país con la fundación del Partido Comunista de Cuba.

Solo la obra de la Revolución Cubana pudo hacer realidad los sueños de el más universal de todos los cubanos. Un ejemplo concreto está relacionado con la educación.

Cuando en 1961 miles de jóvenes y adolescentes participaron voluntariamente como brigadistas en la Campaña Nacional de Alfabetización, la colosal tarea se convirtió en un inédito movimiento de masas que convirtió a Cuba en Territorio Libre de Analfabetismo al llevar la luz de la enseñanza hasta el más apartado rincón de la Isla.

Se cumplía entonces el precepto martiano que afirma: “Al venir a la tierra, todo hombre tiene derecho a que se le eduque, y después, en pago, el deber de contribuir a la educación de los demás”.

De igual modo, el método de enseñanza cubano Yo si puedo fue, asimismo, un programa pedagógico implementado en una treintena de países de Latinoamérica y el Caribe, África, Oceanía y Europa que benefició a más de 10 millones de personas que aprendieron a leer y escribir.

“Patria es humanidad”, expresó el Apóstol y miles de colabores internacionalistas en el sector de la salud han dado muestras de altruismo en diversas latitudes, desandando caminos, ríos, selvas, cordilleras, sorteando riesgos, sembrando salud y salvando vidas.

Mucho le debemos al Maestro. Su infinito amor a la Patria, su vida por la libertad, sus ideas y ejemplo inagotable, quedan como estímulo perdurable. El nos legó la más alta lección: su propia obra.

El homenaje de todos los cubanos y cubanas en el aniversario 172 de su natalicio este 28 de enero es la lucha por la continuidad de la Revolución y de nuestro socialismo.

Trabajadores.cu

Jorge Arreaza: Honduras ha demostrado ser un pueblo del ALBA

Tegucigalpa, 28 de junio de 2024.- El secretario ejecutivo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), Jorge Arreaza, en el marco de los actos conmemorativos de los 15 años del golpe de Estado en Honduras, expresó el orgullo del bloque hacia el pueblo hondureño. 

«Honduras ha demostrado ser un pueblo del ALBA, un pueblo hijo de Francisco Morazán, de Simón Bolívar y de José Martí», señaló Arreaza desde el Instituto Central Vicente Cáceres. 

En cuanto a las acusaciones de la prensa de derecha hondureña, referentes a que la nación bolivariana fue el Foro de São Paulo «para imponerle una guía a Honduras para que sea como Cuba o Venezuela», respondió que «en la izquierda, en los movimientos progresistas y revolucionarios no hay recetas, no hay manuales. Las recetas son las del Fondo Monetario Internacional, las recetas son las de la OTAN, las recetas son las que impone el imperialismo».

En ese sentido, aseguró que desde la Alianza se procura «la libertad, la liberación de nuestros pueblos y compartimos la solidaridad, nos entre apoyamos y nos entre ayudamos siempre. Nosotros solo hemos venido a plantear que cada país debe construir su propio proceso, su propio camino». 

Arreaza enfatizó que «en la izquierda sentimos las necesidades del pueblo, buscamos soluciones a la educación para que sea para todos, a la salud para que sea para todos, a la alimentación, a la vivienda. Lo que estamos buscando es la felicidad como decía el Libertador Simón Bolívar, tratando de construir cada quien desde su territorio, con su propia conciencia y ética, y que el sistema de Gobierno le brinde a los pueblos la mayor suma de felicidad posible».  

Por su parte, el expresidente Manuel Zelaya aseguró que las acciones de reivindicación y de conquista hacia los derechos de los pueblos produce la reacción del imperio y sus organismos. 

Entretanto, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, tomo la palabra para agradecer a los países que se «atrevieron a exponer la verdad en un mundo dominado por la manipulación mediática», al tiempo que alzó su voz en contra del bloqueo económico impuesto por el imperialismo a Venezuela, Cuba y Nicaragua.

A 129 años de su siembra: José Martí renace y vibra en cada verso revolucionario

Caracas, 19 de mayo de 2024.- “Yo vengo de todas partes, y hacia todas partes voy: arte soy entre las artes; en los montes, monte soy”, así era el verso de José Julián Martí Pérez, un poeta y político cubano que dejó huellas imborrables.

Este 19 de mayo se cumplen 129 años de la siembra de Martí, poco después de haber regresado a su país para iniciar lo que denominó «la guerra necesaria».

José Martí, nacido en la mayor de las Antillas, país integrante y fundador –junto con Venezuela- de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), murió en combate en Boca de dos Ríos.

Fundador del Partido Revolucionario Cubano, el también político, periodista y filósofo cubano es recordado en el mundo entero por sus letras, su accionar, el amor a su Patria.

Martí es mártir de la guerra de Independencia de la isla; y aunque haya muerto físicamente, su verbo nunca muere y renace en cada persona que lo aún lo lee.

José Martí luchó contra el ejército español, al que le costó resistir contra los insurgentes por su poca preparación y las enfermedades tropicales.

En cuanto a su producción literaria, gran parte de sus obras fueron ensayos y artículos que denunciaban el orden colonial, como Nuestra América (1891).

Igualmente, elaboró diversas crónicas periodísticas y discursos a favor de la revolución.

Fue un pensador que defendía el fin de las clases sociales y del racismo, así como la descolonización cultural latinoamericana. Criticó la política expansionista de Estados Unidos en el continente, lo que le haría referente para los futuros revolucionarios. 

A 129 años de su siembra, José Martí está más vivo que nunca y cada pueblo lo recuerda como ejemplo de batalla y resistencia, inspirados de grandes causas.